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¿Y quién es  ese hombre? Es  el que lanzó sus versos mas allá del horizonte. Que nunca buscó la gloria, por trinar como el sinsonte.     El que surco mil caminos,    donde muere el arrebol,    para encontrar que la vida    está mas allá del sol. El que buscó las estrellas en profunda oscuridad, en  las   almas más sencillas que Dios llena  de bondad.         Es aquel hombre que supo          que para poder volar,            Por fuertes que sean las alas            no es suficiente aletear.             El que dijo a su cigarra             que no basta  con cantar.

Hace años muchos años,  en tiempos de Tata Lapo una pareja bajó de una escondida montaña, donde poco brilla el sol, por la bruma espesa y mansa que deja escapar la mañana. La cálida Guastatoya,  les dio cobijo en un Rancho en una pintoresca loma,  llena de magia y encanto.  Eran fuertes y eran  bellos, con fulgor en la mirada guardando sirmpre  destellos de una raza ya olvidada. Juntos desde el altar,  felices en su cabaña.  quieren sus sueños forjar ente magueyes y palmas.  Los dos van a  trabajar  cuando llega la mañana.  Cuando la tarde se apaga duermen con las estrellas  Y grillos bajo las piedras. Con el cuidado  del perro,  aquel noble que el abuelo les heredó hace tiempo,  más negro que el mismo cielo de aquellas noches nubladas con estrellas clausuradas,  por una luna simplona.  El perro negro en la loma, siempre cuida por la entrada,  de aquella vieja cabaña.  No hay un mundo feliz,  al que no le aceche el Mal.  bajaron para vivir y buscar felicidad. En aquella bella loma al p

Voz y creación de Daniel Cardona. 

     Triste y Cuitado Mientras la tarde se escurre para engendrar la mañana. Oigo al cenzontle trinar con su flauta campirana. Y yo triste y cuitado por muchas horas de encierro me alegra tanto su canto como la lluvia en el cerro, donde veo  dormir al sol con la caricia del viento. Con el tic tac del reloj y Dios en mi pensamiento. Pidiéndole en oración ¡Fuerza en el confinamiento!

se fue como la luna al asomarse la aurora, como el rocío en la rosa, como la flor en la bruma. Y ahora lloro solitario. Con la biblia entre las manos, repasando viejos diarios, tantas veces archivados. . Con la oración  que repito, más frecuente  en estos días . Porque se han ido  amigos sin abrazo y despedida. Con la fe que en la partida, se renace en Nueva Vida. Amén, amén y amén VIDA ETERNA, amén

Que nunca me deje el niño que nació en los upayales. Jugando con las estrellas y soñando  en los tunales. Así alejar  de mi vida las podridas tentaciones. Y que no vayan mis pasos Al Barrio Las Ambiciones. Y peor si voy y 'Consigo" con  trinquetes y  empujones. Sin un poco  de temor y respeto a las razones Me basta ¡ Oh mi Señor! Que haya un  MENDRUGO en mi mesa Y QUE PUEDA  valorarlo como mi mejor riqueza. Señor  pausá  mi  reloj,   Presuroso como el viento. Pues no  me quiero marchar si no digo lo que siento. Y poder así abrazar al que no tengo "Contento" Y  querer con toda el  alma aquel    amigo sencillo "Que se queda sin gabán" si estoy muriendo de frío. Dame un poco de tu paz, y también dame consuelo. Y si tengo que marchar Préstame un ratito el cielo Y poder así abrazar "Al que no tengo contento"

Confinado en el  oriente, con tímida luna plateada. Dejo relajar la vista en la tarde arrebolada.   "Dios me brinda el privilegio de vivir en esta tierra" Y ver crecer la esperanza del que a la vida se aferra Con un canto de alabanza. Siempre de fe está pintado el cielo guastatoyano, Y nos deja un gran legado "El de tenderle la mano sin distingo al ser humano"

Quiero abrazarte mi viejo Y decirte que te quiero, cerca siempre y no  de lejos. ¡Calma  ansias que te espero! Quiero verte  confinado de la mano de tus sueños Y que narres del pasado cuentos largos y pequeños. Anda y cuéntame de lejos “Mi viajero por los vientos” las penurias de pendejos y los llantos de esperpentos. Cuéntame las osadías de los héroes de antaño. En aquellos duros días de la guerra y del amaño. Cuéntame de los amores de Romeos y Julietas cuando ganaban con flores Y con versos de poetas, los besos de las más bellas que nunca eran compradas, sino fuera con estrellas y luceros de alboradas. Cuéntame de aquel injusto que siempre terminó mal. Que no pasó de ser "Susto" en la historia regional. Mi viejo de mil batallas, mil historias y mil cuentos. Escribiente en las pantallas, confieso mis sentimientos: Quiero estar en tus memorias cuando   haya pasado el mal, que narrarán  las historias de este virus infernal. Las peores

El Pijuy no tiene garbo, me repetía mi hermano. Si caminaba conmigo por suelo Guastatoyano. En una rama o en vuelo parece papel quemado, es un juguete del viento para un lado y otro lado. Pero el Pijuy desgarbado, al trinar es un experto, cuando termina el verano y nos regala un concierto. En lo alto de algún palo es un ruego sin  desmayo, con prodigiosa siringe, por el agüita de mayo. Si oyes un Pijuy cantar, cuando ya va atardecer tu cielo se va alegrar porque vas a ver llover. Descubrir lo que hay por dentro, no ha de tener parangón. Por eso la mejor vista te la brinda el corazón.

F lorecen los jocotíos, por las riberas del Río. Los mismos que un General (Cuando era el mandamás) venía de la Ciudad. Tan solo para admirar su belleza sin igual. Carretera hacia Cruz.

Venimos desde muy lejos a pie y a lomo de mulas. Pará adorar al Señor CRISTO Negro de Esquipulas. Traemos la chirimía Y sonoros tamborones Que acompañan con su son las humildes oraciones, que piden porque haya paz y amor en los corazones. ¡Allá vamos los  PINULAS! por el camino de antaño. Seguros que nuestro Señor no abandona su rebaño. DIOS PADRE, DIOS EL HIJO Y DIOS ESPÍRITU SANTO, abriganos  CON TU MANTO. Bajamos  de las montañas vecinas con  el Naranjo. Con el rocío del campo y el añejo de las cañas. ¡Venimos con nuestra fe Que la fe mueve MONTAÑAS! Oramos porque haya paz y pan en nuestros hogares. Que se acabe la soberbia que nos llena de pesares. Dios el Padre, Dios el Hijo Y Dios Espíritu Santo Danos por siempre paz Y abriganos con tu manto.